Operation Manual

46
ESPAÑOL
A. Conectar la línea central del puente del manómetro a la botella de R-407 por la llave de líquido.
B. Abrir la llave de botella y purgar el trozo de tubería.
C. Abrir la válvula de baja presión y la de alta presión.
D. Presurizar la instalación hasta que se iguale su presión con la de la botella.
E. Cerrar las válvulas del puente de manómetros.
F. Poner en marcha la máquina.
G. Abrir la válvula de baja presión hasta que la presión esté 1 bar por encima del valor de disparo del presostato
de baja.
H. De vez en cuando, cerrar la válvula LO del puente de manómetros para leer la presión real de aspiración.
I. Comprobar que la presión de descarga no aumenta por encima de la que se considera normal para las
condiciones de trabajo.
J. Cuando se haya introducido el peso correcto de refrigerante cerrar la válvula LO.
K. Cuando la instalación esté trabajando según el diseño y condiciones de trabajo, cerrar la válvula de botella de
carga, desconectar las mangueras de los obuses teniendo cuidado con la purga de gas.
L. Colocar los tapones en las tomas de aspiración y descarga del compresor.
Detección de Fugas:
Síntomas de pérdidas de gas.
Las fugas provocan una disminución de la carga de refrigerante en el equipo. Una carga baja puede ser indicada por los
siguientes síntomas:
1. Temperatura de evaporación muy baja. Esto también puede ser debido a una obstrucción de la línea de líquido
o a un mal funcionamiento de la válvula de expansión.
2. Ciclos muy cortos de funcionamiento del compresor.
3. Compresor sobrecalentado: La pérdida de gas provoca un caudal insuficiente de gas para refrigerar el
compresor. Esto puede provocar la activación del termostato interno del compresor.
4. El compresor funciona constantemente, no hay refrigerante suficiente para obtener la potencia esperada, y
como no se llega nunca a la temperatura de consigna, el equipo no para nunca.
En todo caso, es mejor no esperar a que aparezcan fugas e inspeccionar periódicamente el circuito.
Métodos de Búsqueda de Fugas de Gas:
Existen en el mercado diferentes instrumentos de búsqueda de fugas, aunque no todos son suficientemente sensibles
para ciertos refrigerantes. Es muy importante seleccionar un detector adecuado para el refrigerante que incorpora el
equipo y que se cumplan las operaciones de mantenimiento.
También se puede utilizar burbujas de jabón (spray de detergente líquido).
Otros métodos como mecheros de antorcha halógena y aditivos en la instalación son también recomendables para la
localización de fugas.
El Gas R-407-C:
El líquido R 407 C, a diferencia del R22, no es un líquido puro, sino un compuesto mezclado al 23% de R 32 +
25% de R 125 + 52% de R 134 A.
El R-407-C es un gas NO INFLAMABLE, no tiene punto de inflamación, no está sometido, por tanto, a la
reglamentación de transporte de gases inflamables.
El R-407-C no es irritante para la piel, los ojos y las mucosas y no produce sensibilidad cutánea.
Tiene un bajo nivel de toxicidad tanto en exposición única como en exposiciones repetidas, no es mutágeno ni
cancerígeno.
El R-407-C es susceptible de ocasionar congelaciones en contacto del gas licuado con la piel, debido a su
inmediata evaporación.
Como todos los hidrocarburos, halogenados o no, el R-407-C es susceptible, a pesar de su bajo nivel de
toxicidad, de ocasionar un estado preanestésico o anestésico general peligroso si se inhala una concentración
muy elevada en medio cerrado.
Los compresores aprobados para funcionar con este líquido son específicos y están precargados con aceite de
poliolester.
Este aceite, a diferencia del aceite mineral, es muy higroscópico y absorbe muy rápidamente la humedad del aire
ambiente, algo que puede alterar fuertemente sus capacidades lubrificantes y comportar, con el tiempo, la
destrucción del compresor.