Owner’s Manual

Por su seguridad 138
realizar estudios de exposición animal durante toda la vida. Sin embargo, se
necesitarían grandes cantidades de animales para proporcionar pruebas confiables
de un efecto promotor del cáncer, si existiera. Los estudios epidemiológicos pueden
proporcionar datos directamente aplicables a poblaciones humanas, pero puede
ser necesario un seguimiento de diez años o más para obtener respuestas acerca
de algunos efectos sobre la salud, como lo sería el cáncer. Esto se debe a que el
intervalo entre el momento de exposición a un agente cancerígeno y el momento
en que se desarrollan los tumores, en caso de hacerlo, pueden ser de muchos años.
La interpretación de los estudios epidemiológicos se ve entorpecida por la dificultad
de medir la exposición real a RF durante el uso cotidiano de las dispositivos
inalámbricas. Muchos factores afectan esta medición, como el ángulo en el que se
sostiene la dispositivo, o el modelo de dispositivo que se utiliza.
6. ¿Qué está haciendo la FDA para averiguar más acerca de los posibles
efectos en la salud de la RF de las dispositivos inalámbricas?
La FDA está trabajando con el Programa Nacional de Toxicología de los EE.UU.
el Programa nacional de toxicología de los Estados Unidos y con grupos de
investigadores de todo el mundo para garantizar la conducción de estudios de alta
prioridad en animales con el fin de tratar importantes cuestiones sobre los efectos
de la exposición a la energía de radiofrecuencia (RF).
La FDA ha sido un participante líder en el Proyecto Internacional de Campos
Electromagnéticos (EMF, por sus siglas en inglés) de la Organización Mundial de
la Salud desde su creación en 1996. Un influyente resultado de este trabajo ha
sido el desarrollo de una agenda detallada de necesidades de investigación que ha
impulsado el establecimiento de nuevos programas de investigaciones en todo el
mundo. El proyecto también ha ayudado a desarrollar una serie de documentos de
información pública sobre temas del EMF.
La FDA y la Asociación de Internet y telecomunicaciones celulares (CTIA, por su
sigla en inglés) tienen un acuerdo formal de desarrollo e investigación cooperativa
(CRADA, por su sigla en inglés) para investigar la seguridad de los dispositivos
inalámbricos. La FDA proporciona la supervisión científica, recibiendo informes
de expertos de organizaciones gubernamentales, de la industria y académicas.
La investigación patrocinada por la CTIA se realiza por medio de contratos con
investigadores independientes. La investigación inicial incluirá tanto estudios de
laboratorio como estudios de los usuarios de dispositivos inalámbricos. El CRADA
también incluirá una amplia evaluación de las necesidades de investigación
adicionales en el contexto de los más recientes desarrollos de investigación del
mundo.